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Para quienes amamos el arte drag en México, Amanda no necesita presentación. Conductora carismática y sin filtros del programa «La Verdrag» en Canal Once, ha logrado algo que pocos: trascender la pantalla chica y ser reconocida a nivel internacional con un prestigioso premio GLAAD.

Pero, ¿quién es Amanda detrás del maquillaje y las pelucas? En una entrevista reveladora, nos cuenta su fascinante trayectoria, desde sus inicios en el periodismo hasta convertirse en un ícono del drag que rompe estereotipos.

Un nombre que siempre fue acompañado por el arte

Desde el inicio de la conversación, Amanda nos sorprende con la historia detrás de su nombre artístico. Nacida de un personaje teatral llamado Yuri de una conocida obra que conocemos «Mentidrags», Amanda surgió en 2019 con una estrategia muy particular: asegurarse un lugar privilegiado en cualquier listado alfabético. «Como estoy enferma de mí misma, quería aparecer siempre hasta arriba», confiesa con humor.

Pero más allá de la anécdota, Amanda nos revela una profunda conexión con el arte que la acompaña desde la infancia. «Bailo desde que tengo uso de razón, desde los 4 años», recuerda con cariño, mencionando sus inicios en festivales escolares y su incursión en diversos géneros como el folklore, el jazz y el contemporáneo. Sin embargo, su pasión se vio truncada al iniciar su carrera en Televisa Sinaloa, donde le prohibieron bailar por no considerarlo adecuado para una conductora.

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Fusionando el drag con el periodismo

El arte tuvo que esperar, pero la chispa nunca se apagó. Amanda describe su incursión en el drag como un «comeback teatral», una forma de reconectar con su lado artístico. Y aunque el periodismo siempre fue una constante en su vida (¡10 años de trayectoria!), fue en 2023 cuando ambos mundos colisionaron de manera espectacular.

«Les digo en el canal: ‘Oigan, pues ya me mandaron el año pasado a cubrir la marcha y el color, pues este año quiero hacer otra cosa, este año quiero dar noticias'», relata Amanda sobre el origen de «La Verdrag». A pesar de la experiencia previa en televisión, confiesa que hubo cierta desconfianza inicial. Sin embargo, una prueba de conducción donde se mostró bastante «perrilla» bastó para demostrar su talento y, de repente, se volvió viral.

Educar con humor rompe barreras

La clave del éxito de Amanda radica en la perfecta combinación de su experiencia periodística y su personalidad drag. Ella misma lo define como «lo mejor de dos mundos», donde la seriedad informativa se entrelaza con el humor y la espontaneidad. «La mejor manera de educar es hacer reír», afirma con convicción, destacando su gusto por hacer sentir cómoda a la gente y acercarse a la audiencia de una manera jocosa.

Amanda tiene claro que su personaje no busca imponer una agenda educativa, pero celebra cuando su representación de las realidades de los grupos históricamente vulnerados genera conciencia. Su filosofía se centra en evitar el rechazo, creando un espacio seguro y divertido donde la gente pueda reflexionar sin sentirse atacada.

De fan a la alfombra roja: La fantástica experiencia de ganar un premio GLAAD

El momento cumbre de esta entrevista llega cuando Amanda comparte la increíble experiencia de ganar un premio GLAAD. Un reconocimiento que llegó en un momento personal complicado, pero que significó un impulso invaluable. «Cuando me dicen que me gané este premio, pues yo dije como de ‘ah, me gané un premio equis'», recuerda con modestia. Sin embargo, la realidad superó sus expectativas.

A pesar de recibir la notificación poco antes de viajar a Los Ángeles y hasta un día antes de la gala, Amanda vivió una experiencia de ensueño. «Me sentía diario de una princesa, te lo juro, o sea, así me sentía. Yo estaba viviendo mi película de Disney», describe emocionada, recordando su elegante vestido negro inspirado en Audrey Hepburn y sus accesorios glamurosos.

Un futuro incierto en Canal Once pero con un legado imborrable

A pesar del éxito de «La Verdrag», Amanda revela una situación agridulce con Canal Once. Tras los cambios en la producción, el equipo original ya no está, y ella no ha recibido felicitaciones oficiales por el premio. Por ello, prefiere hablar a título personal sobre sus logros.

Sin embargo, su agradecimiento hacia el canal que le brindó la oportunidad es palpable. Reconoce que los puestos son temporales y que, aunque le encantaría continuar con «La Verdrag», está abierta a otras propuestas. Su paso por Canal Once ya ha dejado una huella imborrable, siendo pionera al llevar el arte drag al Palacio de Bellas Artes.

«¡Unámonos y no sean perras!»: El llamado de Amanda a la comunidad Drag

Finalmente, Amanda lanza un poderoso mensaje a la comunidad drag en México. Más allá de la belleza y el glamour, enfatiza la importancia de tener una misión y un objetivo. «Necesitamos drags con misión porque si no, en algún momento los grupos de ultraderecha que están avanzando en otros países van a llegar a México y nos van a agarrar desprevenidas», advierte con preocupación.

Su llamado es a la unidad, a la bondad y a la creación de una comunidad fuerte y solidaria. «Así que, por favor, hermanas drags, unámonos y no sean perras. No sean perras, bufar para qué, hermanas, el mundo ya es demasiado hostil. Seamos buen pedo», concluye con su característico humor y profunda convicción.

Aquí te compartimos la entrevista completa:

La historia de Amanda es un testimonio inspirador de cómo la autenticidad, el talento y la perseverancia pueden romper barreras y alcanzar el éxito. Su visión del drag como una herramienta de conexión y reflexión, combinada con su profesionalismo periodístico, la han convertido en una figura clave para la representación de la comunidad LGBTQ+ en México y más allá.

Estaremos atentos a sus próximos proyectos, seguros de que Amanda seguirá conquistando corazones y abriendo camino para las futuras generaciones de artistas drag

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